Por Soledad
Veracruz, Ver.- Realmente mucho se puede hablar dela descriminación, existe de muy diversas formas y es muy difícil probarla, sólo en casos muy evidentes por discapacidad física o de género o preferencia sexual, siendo más complicado por religión o tendencia filosófica y aún más por tendencia política.
Si eres mujer discapacitada y debido al «machismo» predominante es poco probable que hayas logrado una carrera profesional o un cargo político y mucho menos un empleo estable y lucrativo y si lo obtienes solo es mediante el apoyo de familiares. Sin embargo hoy como consecuencia de las reformas recientes las ofertas de empleo, solo son para jóvenes con buen físico donde poco importa la experiencia o conocimientos y generalmente mujeres jóvenes, así con promesas de un futuro en el gobierno, se les explota de manera que solo se les contrata por tiempo determinado y sin un salario sino una promesa de pago a futuro que dificilmente se cumple.
Es común y conocida la frase «yo te doy trabajo si sales conmigo», es el caso que los Partidos Políticos ahora fomentan éste tipo de contrataciones a fin de cumplir con las cuotas de género y no erogar grandes recursos y de paso explotarlas sexualmente cómo está ocurriendo. En nuestros municipios los sueldos en empleos de ventas o bien de dependiente, además de no alcanzar el mínimo legal, no otorgan las prestaciones de LEY tales como Seguro médico, vacaciones, participación de utilidades, etcétera, sufriendo acoso constante y amenazas,veinte posibilidad de denunciar, son más esclavas que trabajadoras. En cuanto a las profesionistas generalmente obtienen empleo dando clases como maestras o en el gobierno municipal o federal sin tener idea de lo que es la Administración Pública, por ello impera la corrupción y los sobornos y en cuanto al Derecho no conocen la constitución y menos las garantías humanas.