Primero se rompieron los ductos. “De viejos”, explicó Alejandro Islas en su muro de facebook. Después se murió un caballo, tras beber agua contaminada por el derrame provocado. Ahora, el ganado se encuentra en riesgo pues la contaminación en la tierra ha alcanzado el zacate. Adonde llegan los animales.
Como el ganadero acostumbra hablar de frente fue hasta las oficinas de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Poza Rica a fin de hablar con el representante de la empresa del Estado en esta región.
Y prácticamente se lo negaron.
La solución al problema no ha pasado solamente por esto, sino que, después del reporte de su familia a la empresa, los funcionarios a cargo enviaron un veterinario al rancho que se ubica en los límites de Papantla con Poza Rica, a fin de certificar la veracidad de los hechos, pero el doctor iba enfermo. Con todos los síntomas de Covid 19, según la descripción que hiciera el mismo ganadero que a final de cuentas tuvo que ayudar al representante de Pemex a regresarse.
No es la primera vez que los funcionarios de Pemex evaden cumplir con sus responsabilidades. El problema con los derrames, desde 2017, en este rancho, les ha hecho perder como 15 caballos.
La ineptitud de los funcionarios ha pasado ya por intentos de soborno a la familia Islas que se ha negado a la corrupción. La falta de actitud y seriedad por parte de los representantes de la empresa -que fue precisamente nacionalizada para servir a los mexicanos- queda una vez más evidenciada.
(Eric Antonio Martínez).

